Caballeros, me permito presentarles a Sofia, una pequeña sorpresa con un gran par de tetas.

Dejando de lado los juegos de palabras, doy paso a esta reseña. La contacté aproximadamente a las 12:34 P.M. en una noche de calentura, y para mi buena fortuna, no sólo dio una pronta respuesta, también logramos acordar con facilidad una cita para el día siguiente - Hago hincapié en su amabilidad y disponibilidad -

La nena está ubicada a cuadra y media de la Cuarta Brigada, en una urbanización cerrada. Llegué puntualmente a la hora acordada; en la portería me pidieron la cédula a pesar de que ella ya me había anunciado, cosa que me inquietó un poco, pero me la regresaron tras haber registrado el número.

El apto donde atiende queda en un primer piso. Tras esperar unos segundos en la puerta me recibió con una lencería blanca que me dejó prendado de inmediato; aunque para ser franco, lo que más llamó mi atención fue su pequeño tamaño ¡Y eso que usaba tacones! . Sí señores, estamos ante una auténtica lolita de 1.55 - ¡O menos! - lo cual, para mi gusto, fue una muy grata sorpresa. Sí es la de las fotos, una triple mamacita en miniatura con unos senos excepcionalmente grandes y un rostro agradable.

Me llevó a una habitación de tamaño mediano con todas las comodidades, allí pude contemplar su figura con mayor detenimiento. 20 Años aproximadamente, cabello corto de tono rojizo, rostro sonriente, tez morena, piel suave, culo mediano y firme, cintura pequeña, y los senos...madre mía ¡Sus senos son de infarto! Son un par de duraznos morenos de gran tamaño que resaltan más gracias a la pequeñez de la servidora, coronados con un par de pezones simétricos, semiduros y sabrosos. No sería una exageración señalar que son las mejores tetas que he tenido a mi disposición, estuve un buen rato cual ternero pegado de tremendos teteros.

Es un poco tímida, pero no por ello menos propositiva. Se dejó besar bastante, y para mi agrado lo hizo con bastante empeño. En medio de la calentura y confiado por su buena higiene, le practique un buen oral en su vagina que se me antojaba como una papaya madura abierta de par en par lista para derramar su jugo. Tiene un gallito sabroso, se dejó meter lengua hasta bien adentro; eso sí, el culo está fuera del alcance de la lengua y el pene, no le agrada ningún contacto ahí.

La penetración fue intensa y agradable; fue necesario que se echara un poco de lubricante y sin embargo se encontraba un poco seca, por lo que sintió un poco de dolor. El coito se sintió bastante bien, aunque la cintura pequeña y el tamaño de la nena hizo que debiera esforzarme un poco para abarcarla en su entereza y "tener algo de qué agarrarme", al menos mientras la penetraba. En cierta medida, fue una sensación agradable dado mi fuerte inclinación por las chicas pequeñas; someto esto a criterio suyo, caballeros.

Estos serían los aspectos más relevantes; en cuanto a su actitud, a mi forma de verlo fue inmejorable, aunque puedo achacarlo más a la química que tuve con la nena, por lo cual no me atrevo a hacer una apreciación que estaría cargada de subjetividad.

Fueron unos $120.000 pesos muy bien invertidos ¿Volvería a repetir? Sin dudarlo ¿Cuándo? No tengo ni puta idea, tengo ingresos de universitario.

¡Gracias por su atención catadores!