- Titulo personalizado
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Recomiendo evitar a esta negra
Nombre: Kataleya
Nacionalidad: Colombiana
Edad: Según el anuncio tiene 18 años, yo diría que ronda los 20
Lugar: Laureles, edificio alto cerca de la carretera principal
Número: 320 759 6656
Link: https://pasionprepagos.com/escorts/kataleya3207596656
Tarifa: 130k la hora
SERVICIO/ACTITUD: 2/10 La chica parece simpática y atenta pero el servicio acabó tan mal que no puedo valorarlo positivamente.
Rostro: 4/10 Normal, no diría que sea guapa de cara.
Cuerpo: 7/10 Piel negra, muy delgada, culo pequeño, senos caídos y pequeños. El cuerpo es muy chiquito. Es muy baja, puede medir 1,50m.
Fotos: Es la misma de las fotos aunque se nota unos retoques.
Contacto: El contacto es muy bueno, contesta rápido y acepto la propuesta de mi hora sin ningún problema.
La cita:
Queridos parceros, quiero compartir con vosotros mi no muy exitosa aventura con esta chavala. Aunque nada hacía presagiar tal desarrollo las cosas se complicaron mucho al final. No digo que deban rechazar a esta chica de inmediato, pero así fue mi historia, escuchen.
Tenga en cuenta que la reseña es larga pero detallada!!!
Concerté una cita con ella por la mañana, pero no demasiado temprano para poder desayunar temprano y no tener hambre durante la relación. Mi propuesta fue aceptada sin más. Llegué al lugar con unos 5 minutos de retraso, la razón fue que no había previsto el tráfico que había en la ruta a esa hora. Culpa mía, lo reconozco. Previamente le había mandado un mensaje a la chica para que saliera del edificio a recogerme porque no quería perderme y hacer perder un tiempo precioso. Así que llegué al edificio, dirigiéndome primero a la entrada principal con la esperanza de localizar a mi ama. Por desgracia, no vi a nadie que coincidiera con la persona de las fotos por allí. Caminé cuidadosamente alrededor del edificio bastante grande desafortunadamente sin resultado (había enviado previamente un mensaje de texto a "wa" pero ella no me contestó). Finalmente llegué al aparcamiento y desde lejos veo a una chica negra. Me acerco a ella y la saludo. Ella sólo me contestó groseramente: "Piérdete payaso porque estoy esperando a alguien aquí". No me esperaba una respuesta así y entonces, sin pensarlo demasiado, doy dos pasos atrás y me vienen a la cabeza pensamientos como que quizás había venido aquí para nada y la chica me había tendido una trampa. Miré a mi alrededor y no vi a nadie más que a nosotros así. Muchacha estaba de pie junto a un viejo vehículo alemán, así que se me ocurrió que estaba esperando a su conductor. Miré el vehículo detenidamente. Parecía uno fabricado en la década de 1950, un alemán lo condujo durante 30 años y luego lloró al venderlo a Ucrania, lo condujeron allí durante otra docena de años más o menos y luego lo vendieron a Colombia a precio de chatarra. Ya estaba a punto de irme e incluso giré en otra dirección, pero me di cuenta de que uno de los neumáticos del coche estaba pinchado. Ajá, pensé, tal vez mi suposición no sea cierta después de todo. Volví a mirar a la chica. No entiendo de mujeres negras (todas me parecen iguales), pero esta me pareció igual que la del anuncio. Así que me acerco a ella una vez más y le digo que ésta me está esperando. Ella empezó a explicarme que se llamaba Kataleya y que estaba esperando a un chico para encontrarse con ella a esa hora. Le digo: está bien soy yo. En ese caso, guíame. Salimos del aparcamiento y nos dirigimos a la entrada. Desgraciadamente la mala suerte quiso que debido a mi estrés tropezara en los escalones y casi salgo volando y me rompo todos los dientes. Afortunadamente, nada resultó herido, salvo mi orgullo. Pasamos por delante de la garita y, por alguna razón, me quité el sombrero para saludar al guardia de seguridad, pero se limitó a mirarme como si fuera un extraterrestre. Pensé: "Nunca has visto a un gringo al que le guste el chocolate" ¡Vaya mundo!
Entramos en el ascensor y subimos. Quería acabar de alguna manera con el incómodo silencio y le pregunto si es la última planta y me dice que la penúltima. Segundos después pensé en lo estúpido que había sido, después de todo había visto lo que ella había pulsado en el panel del ascensor y pregunté estúpidamente. Bueno, suele pasar. Salimos del ascensor y nos dirigimos al piso. Entramos primero en el salón, la chica va directa a su habitación, y yo al ver la preciosa vista de toda la ciudad, miro hacia arriba y ya quiero hacerme un selfie, cuando la chica vuelve y me dice "No te quedes ahí o un pájaro te cagará en la cabeza". Ok, ya entendí. Así que entro en la habitación detrás de ella, me dice que me siente cómodamente. Me desnudo y me tumbo en la cama y ella se quita la ropa exterior y se queda en lencería. Recordé que según el anuncio ella se ofrecía a compartir una ducha, a mí no me la ofreció, pero bueno, pérdida de tiempo. Empieza a decir si quiere oral o anal o que. Sólo le contesté que por mi parte es asqueroso y que si le hiciera anal creo que vomitaría y luego ella también y toda la habitación estaría en vómito. Bueno, le di el dinero y ella empezó a retorcerse el culo delante de mi nariz y en general a hacer una especie de baile para excitarme. Le digo, ya está bien, pero primero que se quite ese sujetador y luego que me haga un oral. Sus senos son pequeños, caídos, nada especial.
Oral era incluso bueno, en el precio base era natural, sin condón. Entonces ella me muestra el condón, respondo empezamos. Ella se tumba de espaldas sobre mí y empieza a ponérselo. No puedo ver exactamente lo que está pasando, pero algo me dice que está tardando demasiado. La muchacha se aparta un momento y me muestra que el condón es demasiado pequeño para mi pene y que la polla no entra. Le pregunto si tiene otros y me dice que sólo éste. (Fue en ese momento cuando recordé que el día anterior le había preguntado en el 'wa' si tenía PRESERVATIVOS en su casa. En PLURAL, y me contestó que sí) Vaya por Dios. Ella se cansó, hizo algo ahí y de alguna manera entró, pero el condón no llegó hasta el fondo del pene sino hasta la mitad. Le pregunté si podía ser así, porque soy un chico joven y no lo sé. Ella dice que es una mierda y que no lo sabe, pero allá vamos. Ella quiere entrar en mi pero no hay manera de que entre mi amigo. Lo intenta de todas las maneras pero no cuela, está tan apretado que no entra. Ya me duele tanto el pene que pienso que estoy a punto de terminar en el hospital con el pene roto y al día siguiente estarán hablando de mí en las noticias, que un gringo se rompió el pene en Colombia. Divertido, pero no para mí. Finalmente aplicó lubricante primero en su coño y luego en mi condón y de alguna manera entró. Incluso estaba bien, pero su largo pelo seguía entrando en mi boca. La chica gritaba algo como "Así, así" y "Qué rico", así que parecía que se lo estaba pasando mejor que yo. Sin embargo, todo aquello tuvo tal efecto en mí que me vine inmediatamente. Me quité el condón y pensé que ahora. Chica ¿todavía tienes algún condón, puede que incluso se hayan usado pero a mí me quedan 40 minutos y ni siquiera tengo un condón. Se fue al armario y busco allí como no se. Finalmente ella dice que todavía tiene algunos. Vale digo yo, pero dame un poco de descanso. Me tumbo en la cama y pienso qué hago con mi vida y ella se tumba a mi lado y me masajea los huevos. Le digo vale ya está bien no voy a perder el tiempo ponte otro condón. Ella se lo pone, pero me queda en el pene igual que el anterior, que asco. La coloco en otra posición y empezamos por detrás. Fue muy guay, incluso lo disfruté. Duró bastante tiempo, así que me cansé. Saco mi pene y no puedo creer lo que veo. El condón ha desaparecido. Le digo, joder que ha pasado!!!
Y ella me contesta tranquilamente que el condón se quedó dentro y que lo saque. Le digo que no lo haré porque es asqueroso y en general apesta ahí dentro. La chica se levanta y saca el condón de dentro. Yo, todo asustado, empiezo a vestirme y pienso, ya está bien de tanta vergüenza. Ella me mira con lástima y no contesta nada, pero también empieza a vestirse. Me acompaña hasta la puerta. Me dirijo al ascensor y espero a que llegue, pero veo que está de pie en la puerta mirándome todo el rato. Seguro que está pensando pero gringo estúpido con el que me he cruzado.
Conclusión: Aparentemente fue divertido, pero en realidad una pérdida de dinero para tanto estrés.
No la recomiendo a menos que empiece a comprar condones más grandes.
Si les gusta el chocolate es aún una buena opción.
Parceros, por favor, rezad para que no coja ningún virus a causa de esto.
Nacionalidad: Colombiana
Edad: Según el anuncio tiene 18 años, yo diría que ronda los 20
Lugar: Laureles, edificio alto cerca de la carretera principal
Número: 320 759 6656
Link: https://pasionprepagos.com/escorts/kataleya3207596656
Tarifa: 130k la hora
SERVICIO/ACTITUD: 2/10 La chica parece simpática y atenta pero el servicio acabó tan mal que no puedo valorarlo positivamente.
Rostro: 4/10 Normal, no diría que sea guapa de cara.
Cuerpo: 7/10 Piel negra, muy delgada, culo pequeño, senos caídos y pequeños. El cuerpo es muy chiquito. Es muy baja, puede medir 1,50m.
Fotos: Es la misma de las fotos aunque se nota unos retoques.
Contacto: El contacto es muy bueno, contesta rápido y acepto la propuesta de mi hora sin ningún problema.
La cita:
Queridos parceros, quiero compartir con vosotros mi no muy exitosa aventura con esta chavala. Aunque nada hacía presagiar tal desarrollo las cosas se complicaron mucho al final. No digo que deban rechazar a esta chica de inmediato, pero así fue mi historia, escuchen.
Tenga en cuenta que la reseña es larga pero detallada!!!
Concerté una cita con ella por la mañana, pero no demasiado temprano para poder desayunar temprano y no tener hambre durante la relación. Mi propuesta fue aceptada sin más. Llegué al lugar con unos 5 minutos de retraso, la razón fue que no había previsto el tráfico que había en la ruta a esa hora. Culpa mía, lo reconozco. Previamente le había mandado un mensaje a la chica para que saliera del edificio a recogerme porque no quería perderme y hacer perder un tiempo precioso. Así que llegué al edificio, dirigiéndome primero a la entrada principal con la esperanza de localizar a mi ama. Por desgracia, no vi a nadie que coincidiera con la persona de las fotos por allí. Caminé cuidadosamente alrededor del edificio bastante grande desafortunadamente sin resultado (había enviado previamente un mensaje de texto a "wa" pero ella no me contestó). Finalmente llegué al aparcamiento y desde lejos veo a una chica negra. Me acerco a ella y la saludo. Ella sólo me contestó groseramente: "Piérdete payaso porque estoy esperando a alguien aquí". No me esperaba una respuesta así y entonces, sin pensarlo demasiado, doy dos pasos atrás y me vienen a la cabeza pensamientos como que quizás había venido aquí para nada y la chica me había tendido una trampa. Miré a mi alrededor y no vi a nadie más que a nosotros así. Muchacha estaba de pie junto a un viejo vehículo alemán, así que se me ocurrió que estaba esperando a su conductor. Miré el vehículo detenidamente. Parecía uno fabricado en la década de 1950, un alemán lo condujo durante 30 años y luego lloró al venderlo a Ucrania, lo condujeron allí durante otra docena de años más o menos y luego lo vendieron a Colombia a precio de chatarra. Ya estaba a punto de irme e incluso giré en otra dirección, pero me di cuenta de que uno de los neumáticos del coche estaba pinchado. Ajá, pensé, tal vez mi suposición no sea cierta después de todo. Volví a mirar a la chica. No entiendo de mujeres negras (todas me parecen iguales), pero esta me pareció igual que la del anuncio. Así que me acerco a ella una vez más y le digo que ésta me está esperando. Ella empezó a explicarme que se llamaba Kataleya y que estaba esperando a un chico para encontrarse con ella a esa hora. Le digo: está bien soy yo. En ese caso, guíame. Salimos del aparcamiento y nos dirigimos a la entrada. Desgraciadamente la mala suerte quiso que debido a mi estrés tropezara en los escalones y casi salgo volando y me rompo todos los dientes. Afortunadamente, nada resultó herido, salvo mi orgullo. Pasamos por delante de la garita y, por alguna razón, me quité el sombrero para saludar al guardia de seguridad, pero se limitó a mirarme como si fuera un extraterrestre. Pensé: "Nunca has visto a un gringo al que le guste el chocolate" ¡Vaya mundo!
Entramos en el ascensor y subimos. Quería acabar de alguna manera con el incómodo silencio y le pregunto si es la última planta y me dice que la penúltima. Segundos después pensé en lo estúpido que había sido, después de todo había visto lo que ella había pulsado en el panel del ascensor y pregunté estúpidamente. Bueno, suele pasar. Salimos del ascensor y nos dirigimos al piso. Entramos primero en el salón, la chica va directa a su habitación, y yo al ver la preciosa vista de toda la ciudad, miro hacia arriba y ya quiero hacerme un selfie, cuando la chica vuelve y me dice "No te quedes ahí o un pájaro te cagará en la cabeza". Ok, ya entendí. Así que entro en la habitación detrás de ella, me dice que me siente cómodamente. Me desnudo y me tumbo en la cama y ella se quita la ropa exterior y se queda en lencería. Recordé que según el anuncio ella se ofrecía a compartir una ducha, a mí no me la ofreció, pero bueno, pérdida de tiempo. Empieza a decir si quiere oral o anal o que. Sólo le contesté que por mi parte es asqueroso y que si le hiciera anal creo que vomitaría y luego ella también y toda la habitación estaría en vómito. Bueno, le di el dinero y ella empezó a retorcerse el culo delante de mi nariz y en general a hacer una especie de baile para excitarme. Le digo, ya está bien, pero primero que se quite ese sujetador y luego que me haga un oral. Sus senos son pequeños, caídos, nada especial.
Oral era incluso bueno, en el precio base era natural, sin condón. Entonces ella me muestra el condón, respondo empezamos. Ella se tumba de espaldas sobre mí y empieza a ponérselo. No puedo ver exactamente lo que está pasando, pero algo me dice que está tardando demasiado. La muchacha se aparta un momento y me muestra que el condón es demasiado pequeño para mi pene y que la polla no entra. Le pregunto si tiene otros y me dice que sólo éste. (Fue en ese momento cuando recordé que el día anterior le había preguntado en el 'wa' si tenía PRESERVATIVOS en su casa. En PLURAL, y me contestó que sí) Vaya por Dios. Ella se cansó, hizo algo ahí y de alguna manera entró, pero el condón no llegó hasta el fondo del pene sino hasta la mitad. Le pregunté si podía ser así, porque soy un chico joven y no lo sé. Ella dice que es una mierda y que no lo sabe, pero allá vamos. Ella quiere entrar en mi pero no hay manera de que entre mi amigo. Lo intenta de todas las maneras pero no cuela, está tan apretado que no entra. Ya me duele tanto el pene que pienso que estoy a punto de terminar en el hospital con el pene roto y al día siguiente estarán hablando de mí en las noticias, que un gringo se rompió el pene en Colombia. Divertido, pero no para mí. Finalmente aplicó lubricante primero en su coño y luego en mi condón y de alguna manera entró. Incluso estaba bien, pero su largo pelo seguía entrando en mi boca. La chica gritaba algo como "Así, así" y "Qué rico", así que parecía que se lo estaba pasando mejor que yo. Sin embargo, todo aquello tuvo tal efecto en mí que me vine inmediatamente. Me quité el condón y pensé que ahora. Chica ¿todavía tienes algún condón, puede que incluso se hayan usado pero a mí me quedan 40 minutos y ni siquiera tengo un condón. Se fue al armario y busco allí como no se. Finalmente ella dice que todavía tiene algunos. Vale digo yo, pero dame un poco de descanso. Me tumbo en la cama y pienso qué hago con mi vida y ella se tumba a mi lado y me masajea los huevos. Le digo vale ya está bien no voy a perder el tiempo ponte otro condón. Ella se lo pone, pero me queda en el pene igual que el anterior, que asco. La coloco en otra posición y empezamos por detrás. Fue muy guay, incluso lo disfruté. Duró bastante tiempo, así que me cansé. Saco mi pene y no puedo creer lo que veo. El condón ha desaparecido. Le digo, joder que ha pasado!!!
Y ella me contesta tranquilamente que el condón se quedó dentro y que lo saque. Le digo que no lo haré porque es asqueroso y en general apesta ahí dentro. La chica se levanta y saca el condón de dentro. Yo, todo asustado, empiezo a vestirme y pienso, ya está bien de tanta vergüenza. Ella me mira con lástima y no contesta nada, pero también empieza a vestirse. Me acompaña hasta la puerta. Me dirijo al ascensor y espero a que llegue, pero veo que está de pie en la puerta mirándome todo el rato. Seguro que está pensando pero gringo estúpido con el que me he cruzado.
Conclusión: Aparentemente fue divertido, pero en realidad una pérdida de dinero para tanto estrés.
No la recomiendo a menos que empiece a comprar condones más grandes.
Si les gusta el chocolate es aún una buena opción.
Parceros, por favor, rezad para que no coja ningún virus a causa de esto.
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